El agotamiento laboral, también conocido como síndrome de Burnout, es una respuesta extrema al estrés crónico en el lugar de trabajo, afectando principalmente a individuos que experimentan una carga laboral excesiva, presión constante y falta de control sobre sus actividades laborales.
Es un estado de agotamiento físico, mental y emocional que se produce cuando una persona se siente abrumada por el estrés laboral.
Estas son algunas características que se presentan en las personas con el síndrome:
– Agotamiento emocional. Las personas pueden experimentar sentimientos de tristeza, ansiedad, ira o frustración de manera constante, dificultando la capacidad de una persona para relacionarse con otros y disfrutar de actividades fuera del trabajo.
– Despersonalización. La persona puede volverse cínica, distante y desapegada en sus interacciones con colegas, clientes o pacientes, lo que puede afectar negativamente las relaciones laborales y personales.
– Reducción del rendimiento laboral. Las personas con estrés laboral crónico pueden volverse menos productivas, cometer errores con más frecuencia y tener dificultades para concentrarse en sus tareas.
Algunos síntomas son:
– Problemas físicos. Como dolores de cabeza, problemas gastrointestinales, como náuseas, vómito y diarrea, tensión muscular como dolores, especialmente en el cuello, hombros y espalda, además de fatiga extrema.
– Insomnio y trastornos del sueño. El Burnout a menudo interfiere con el sueño, lo que puede llevar a insomnio o a patrones de sueño interrumpidos, lo que empeorará los síntomas y sobre todo, afectará aún más la salud mental.
– Problemas digestivos, como náuseas, vómitos y diarrea.
– Aumento del riesgo de trastornos de salud mental. El Burnout puede aumentar el riesgo de desarrollar trastornos de salud mental, como la depresión y la ansiedad. La depresión se muestra cuando hay signos de tristeza, desesperanza y pérdida de interés en las actividades que solía disfrutar.
– Aislamiento social. Las personas con Burnout pueden retirarse socialmente, sintiéndose incapaces de participar en actividades sociales o mantener relaciones personales saludables debido a la fatiga y la irritabilidad.
Es importante reconocer los signos de Burnout a tiempo y buscar apoyo y ayuda de un especialista. La prevención y el tratamiento temprano son necesarios para evitar impactos duraderos o a largo plazo en la salud mental.
Algunas sugerencias pueden incluir reducir la carga de trabajo, establecer límites saludables, buscar apoyo terapéutico y tomar medidas para manejar el estrés de manera efectiva.
Te compartimos estos consejos que te ayudarán a prevenir el síndrome del Burnout:
- Establece límites saludables: No intentes hacerlo todo, delega tareas cuando sea posible y aprende a decir que no.
- Cuídate: Asegúrate de dormir lo suficiente, comer alimentos saludables y hacer ejercicio regularmente, puedes realizar meditaciones.
- Toma descansos: Tómate descansos regulares durante el día y durante la semana para relajarte y recargar energías.
- Busca apoyo: Habla con amigos, familiares o un terapeuta sobre cómo te sientes.
Mtra. Nury Diana Contreras Espinosa
Directora de la Escuela de Psicología